Otro apetecido crustáceo, el picoroco (Megabalanus psittacus),
muy diferente en forma a los demás, que vive adherido a las rocas y no puede desplazarse.
En la zona litoral, en playas rocosas o de bolones, existe un gran número de especies de invertebrados y algas que la convierten en una zona de gran productividad biológica. En los sectores rocosos donde abundan las grandes algas se encuentran unos crustáceos sésiles muy modificados, que se denominan científicamente como Cirripedios, pero que se conocen como picorocos.
Estos invertebrados son de vida libre en sus estados larvales, y luego permanecen adheridos a las rocas durante todo el resto de su vida, alimentándose del plancton y del material orgánico que arrastra el mar.
Existen numerosas especies, de distintos tamaños. El mayor es el picoroco comestible, denominado científicamente Megabalanus psittacus. Hay otros muy pequeños y muy abundantes a lo largo de todo el litoral chileno, como es el caso de Balanus laevis, Balanus floscolus y Jehlius cirratus, que suelen tapizar las rocas, dificultando la marcha cuando se camina a "pata pelada". Estos pequeños cirripedios son el alimento preferido del loco (Concholepas concholepas).
5 comentarios :
esta pagina es una cagá... me hiso malgastar mi estupido tiempo y tu mamá no sabe aser chocolate en navidad... me cago en dios fuck yeah!
tu pinche vieja jo puto!!
oye... tu mamá me la lamio muy bien ayer.. dile qe la felicito y qe se acuerde de lamermela hoy :) ;D
ok! yo le digo :)
Anónimo, tus excrementos huelen horrible.
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